Los vehículos aéreos no tripulados entregan una mayor eficiencia en los procesos de mapeo de ubicaciones de instalaciones, exploración, seguimiento de equipos, entre otros. Es sabido que muchas veces la topografía y el mapeo de paisajes minerales suelen ser procesos lentos y complejos debido a las condiciones existentes, pero con los drones es mucho más eficaz, ya que permite recopilar con alto detalle una gran extensión de terreno en tan sólo minutos, sin la necesidad de exponer al usuario a zonas de riesgos o difícilmente accesibles. Otro de los beneficios directos tiene relación con el levantamiento de grandes infraestructuras, las que por sus condiciones artificiales presentan un reto no menor a la topografía clásica.